martes, 17 de abril de 2007

de serte, y no reclamarte...
















Ese espacio en que no te veo
ese que era lo que poseía ten aferradamente,
ese que me dio la oportunidad
de serte y no reclamarte,
de soñarte y besarte,
de abrazarte y odiarte…

Sí, me equivoqué de puerto
me equivoqué de aguas,
los vientos me engañaron,
me arrastraron
me sedujeron
qué prisa tuve por arribar al tuyo…

2 comentarios:

Crisálida dijo...

De verdad tuviste prisa? O es más bien que lo piensas tanto que no te queda luego más opción que correr hacia otro puerto? Pensalo... Tal vez atreverse más, lanzarse sin pensarlo tanto, sea una buena opción. No crees?

JOe dijo...

Pues es mas bien una pequeña obsesión de tener seguridad en el puerto donde me he de abastecer.
Saber que ese es...